Romperse
¿Se nota? Si se nota. Ha llegado esa época de cambios, esa época que te rompe para volver a construirte como quieras. Se nota la ilusión, el olor a nuevo, el miedo de la incertidumbre de los comienzos y de los retos por conseguir. Pero también está la despedida de un verano raro, pero verano al fin y al cabo. La morriña se apodera de ti y se vuelve tan común como el café por la mañanas.
Comienzan los días lluviosos, las tardes de sofá y manta y las esperanzas de empezar un nuevo año. Porque todos sabemos que en septiembre construimos más propósitos que en enero.
Lo siento enero, septiembre es el verdadero comienzo de año.